En los cerros Nutibara y Volador
Adecuación paisajística y construcción ambiental
El área metropolitana en su preocupación por controlar los asentamientos subnormales que día a día invaden los cerros Nutibara y Volador que son los tutelares del Valle de Aburra, tomó medidas de protección para la conservación de la fauna y la flora que se halla en ambos sitios, como la conexión del río y sus quebradas aledañas, para lograr su sostenibilidad.
Y para esto realizó un censo de todo lo existente y evaluó las densidades poblacionales de los diversos animales que allí habitan, para luego conseguir el equipamiento indispensable y adecuado para poder darle inicio al proyecto y sus objetivos, ya que a través de éste se crearán bases para diagnosticar si hay alto riesgo epidemiológico o no.
Cabe destacar que esta entidad desea educar al ciudadano, para que tenga conciencia de que la naturaleza y todos sus componentes son amigos y que por ende se deben respetar y proteger, de este modo las personas evitarán cometer acciones que afecten tanto el ecosistema como la parte ambiental de estos cerros. Además quieren subrayar que las personas que habitan allí lo hacen debido a sus bajos niveles económicos, más no por querer destruir algo que es de gran importancia para el país.
Sin embargo la historia refleja que en los años 50 una fiebre de oro se apoderó del país, que en busca de un falso dorado llegó a los distintos asentamientos indígenas buscando imaginarios tesoros; lo que generó la casi destrucción del cerro; la gente en búsqueda de guacas se percató de que no existía nada de valor que ameritara continuar con esta carrera sin ton ni son.
El Área Metropolitana va a adecuar los cerros de manera que se conviertan en un sitio turístico, mediante caminos veredales, paraderos turísticos, jardineras y miradores, donde las personas podrán disfrutar de un ambiente natural, ecológico y tranquilo en el cual se enriquecerán de aprendizajes botánicos y silvestres ya que este enfoque se presta para darle un cambio a los nacimientos de agua y demás lugares que rodean a estos.
Incluso el Área Metropolitana del Valle de Aburrá va a “incorporar la dimensión ambiental a la planeación del desarrollo en el territorio metropolitano, partiendo del conocimiento del estado de los recursos naturales, sus potencialidades, limitaciones, la dependencia de bienes y servicios ambientales del entorno próximo, que obliga a que esta entidad se piense como parte de una ecorregión de la cual hacen parte ecosistemas estratégicos”.
Cuando se le preguntó al director del Área Mauricio Faciolince por los costos y el plazo considerado para un feliz término del proyecto, fue ambiguo en ambas respuestas, por lo que se estima que puede costar miles de millones de pesos que se derivarán de los comparendos ambientales y licencias expedidas por esta institución.
Fuente: http://www.areadigital.gov.co/Pages/Inicio.aspx
Shantall Andrea González Duque
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